Avergonzante derrota de los Lakers ante unos Mavs sin Doncic ni ...
A Los Ángeles Lakers les pasa un mal de franquicia grande lógico y normal porque el pedigrí sigue importando en la NBA. Hay determinados partidos que son malos, como pasa habitualmente a lo largo de la temporada, pero parece que todos los más relevantes les van a tocar a ellos. Y si alguien podía revivir a unos Dallas Mavericks que encadenaban cinco derrotas consecutivas y no cuentan, por lesión, con Luka Doncic ni Kyrie Irving eran los oro y púrpura. Pues ocurrió. En una derrota (118-97) que saca los colores de un equipo todavía muy lejos de la primera línea de favoritos.
El partido de los Lakers fue malo después de un primer cuarto que ganaban por la mínima (24-27). A partir de ahí, el equipo angelino dejó de carburar y no volvió a acercarse a los 30 puntos en alguno de los periodos. Los Mavericks, más entonados que en sus últimos cinco derrotas, tomaron el mando y ya no soltaron un ritmo mejor.
La tónica fue la de unos Lakers sin abandonarse, pero sin acercarse. No salieron mal al último cuarto, donde bajaron de los 10 (84-93, 39'). Pero a Dallas no le tembló el pulso. Resistieron al empujón de LeBron James y el debutante Dalton Knecht con un correcto Klay Thompson, y todo cambió en otro final desastroso de los californianos.
En los últimos cuatro minutos y 42 segundos, los Lakers se apagaron. Seguían ahí, a una distancia prudencial. Pero pasaron al cero. 0 puntos anotados, 0/5 en tiros de campo intentados y cinco pérdidas para entregar el triunfo a Dallas y alejarse de acomodarse en las posiciones altas del Oeste.
"No sienta bien perder en cinco seguidos, pero hoy ganar nos sienta muy bien. Debemos construir sobre esto y volver a trabajar
PJ Washington
"Jugamos juntos, con la mentalidad correcta", repitió PJ Washington, uno de los mejores con 22 puntos. Los 23 puntos y 9 asistencias de Quentin Grimes también ayudaron para salir del bache. "No sienta bien perder en cinco seguidos, pero hoy ganar nos sienta muy bien. Debemos construir sobre esto y volver a trabajar", añadió el alero.
Les tenemos [a Dallas] máximo respeto y temor
JJ Redick
Aprovecharon, por completo, el bajón angelino. Los 18 puntos y 10 rebotes de LeBron James, que dejó la jugada de la jornada con un mate brutal sobre Dereck Lively Jr. (un jugador de 40 sobre uno nacido un año después (2004) de la entrada de LeBron en la NBA), o los 21+12 de Anthony Davis son relevantes, pero el equipo oro y púrpura se cayó. Y es una derrota que duele porque las franquicias grandes no fueron concebidas para caer así. Pese a que decía JJ Redick que planteaban el partido con todo. "Máximo respeto y temor, son jugadores NBA", comentó en la previa.