Por qué Disney podría cambiar radicalmente su enfoque a partir del 3 de abril

Algunos miembros no están de acuerdo con la política "woke" de la compañía

El 3 de abril podría marcar un punto de inflexión para Disney ya que la compañía se enfrenta a una encrucijada que podría alterar su rumbo estratégico en el futuro cercano. En el centro de esta batalla se encuentra Nelson Peltz y su poderosa empresa de gestión de fondos Trian Partners, respaldados por miles de millones de dólares en acciones de Disney, quien pretende cambiar el enfoque de las actuales producciones de la compañía del ratón.

A su lado está Ike Perlmutter, expresidente de Marvel, quien fue apartado de la filial de superhéroes el pasado año 2023 debido a una reestructuración corporativa, y junto a otros varios accionistas decidirán el futuro de Disney muy pronto, aunque todo podría quedarse como está, o realizándose tan solo cambios menores.

Las políticas "woke" en el centro de la polémica

Peltz ha cuestionado públicamente la estrategia actual de Disney, planteando interrogantes sobre las decisiones clave de la empresa. Recientemente ha criticado la idea de un enfoque "woke" en las producciones de Disney, preguntando por qué se necesitan versiones exclusivamente femeninas o afrodescendientes de personajes de Marvel, en alusiones a The Marvels, reflejando así también las preocupaciones de Perlmutter sobre el rumbo de la compañía bajo el liderazgo de Bob Iger, actual director ejecutivo de Disney tras su marcha y posterior reincorporación en la dirección.

Además, el Servicio de Accionistas Institucionales recomendó el pasado 21 de marzo y vistos los últimos resultados, votar a favor de Peltz sobre la actual miembro de la junta de Disney, Maria Elena Lagomasino, quien sería destituida de su cargo.

Bob Iger plantará cara

Sin embargo, nunca hay que subestimar el poder de persuasión de Bob Iger, quien ya ha movilizado a sus aliados y lanzado una serie de anuncios destinados a tranquilizar a los accionistas sobre el futuro de la compañía, entre los que ha incluido los de las continuaciones de Moana y Del revés. Así las cosas, el resultado sigue siendo incierto y el destino de Disney parece estar sin decidir a tan solo unos días de la reunión.

Y aunque Iger parece que tiene asegurado su puesto en el sillón hasta 2026, lo que se vote el próximo miércoles 3 de abril podría cambiar el rumbo a partir de entonces, si no antes. Esta batalla no se trata solo de la composición de la junta directiva de Disney, sino también de la dirección que tomará la empresa en los próximos años. Las decisiones tomadas en tan solo unos días podrían tener profundas repercusiones en la estrategia de Disney, desde sus producciones cinematográficas y televisivas hasta su enfoque en la diversidad y la inclusión.

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